Datos Historia El linaje de Traslaviña, a quien perteneció la torre, fue fundado por Juan García de Traslaviña en 1400. Es posible que esta torre fuera construida a fines del XV o principios del XVI por don Pedro Hurtado de Traslaviña-La Puente, al que ya se le cita en 1499 y 1512. A mediados del XVI se adosó a su fachada trasera un hermoso palacio, que le hace único en Vizcaya. En el XVII pasaría a manos de los Hurtado de Mendoza. Originalmente fue muy alta, pero llegó al s. XIX tan rebajada como la vemos ahora
Mampostería
Sillería
Sillarejo
Tipo estructura:
Simple
Planta:
Cuadrada
Elementos arquitectónicos:
Ingresos adintelados en la primera planta, en la segunda ventana apuntadaa. Conserva patin de acceso. En la primera mitad del XVI se le añadió un edificio palacialAunque llegó a ser muy alta y con cubos volados en sus esquinas, hoy está muy rebajada, midiendo unos 9 metros de altura. Conserva no obstante un considerable grosor de muros, varias saeteras en distintas alturas, así como ventanitas apuntadas en el primer piso, donde también hay el acceso alto sobre patín. El acceso hoy es adintelado, pero se vé claramente que en origen lo fue de medio punto. En varios sillares de este acceso, así como en los de alguna ventana, conserva varias marcas de cantero, únicas por su forma en Vizcaya. En el primer cuarto del s. XVI se adosó a su fachada trasera un palacio muy rectangular y mucho mas bajo que la torre, con una airosa galería de ventanas conopiales
Estado:
Regular
Causas del deterioro:
Desmontes Urbanos
Uso actual:
Vivienda privada
Titularidad:
Privado
Tipo:
Categoría: Monumento
Decreto:
14 de enero de 2002
Observaciones legales:
Boletín Oficial de Bizkaia nº 29 del 11 de febrero de 2002
Datos Historia El linaje de Traslaviña, a quien perteneció la torre, fue fundado por Juan García de Traslaviña en 1400. Es posible que esta torre fuera construida a fines del XV o principios del XVI por don Pedro Hurtado de Traslaviña-La Puente, al que ya se le cita en 1499 y 1512. A mediados del XVI se adosó a su fachada trasera un hermoso palacio, que le hace único en Vizcaya. En el XVII pasaría a manos de los Hurtado de Mendoza. Originalmente fue muy alta, pero llegó al s. XIX tan rebajada como la vemos ahora
Bibliografía Juan Manuel González Cembellín: Torres de las Encartaciones. Tomo II, pp. 414 a 421