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Asociación española de amigos de los Castillos, Castillos de España, Castillos medievales
ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE AMIGOS DE LOS CASTILLOS

Recinto amurallado

La ciudad constaba de dos recintos que separaban el barrio judio del cristiano, existiendo sendos castillos en cada uno de ellos.
Dado el carácter de la villa, hay referencias a la muralla desde 1052. En esta fecha se citan las puertas Antigua y Lóbrega, el azor de los judíos e «illo azor de foras cum sua porta». Por lo tanto, los textos distinguen entre azor o murallas internas y externas: aquéllas corresponderían a los judíos, éstas, a las de la villa. Lógico es pensar que los diversos aumentos demográficos determinarían la ampliación del casco amurallado, como también lo es el suponer que las constantes luchas entre Castilla contra Navarra y Aragón durante el siglo XII, y el enfrentamiento entre Pedro I y Enrique de Trastamara a mediados del XIV, y sus repercusiones sobre las villas, obligarían a sus vecinos a su reparación y mejora constantes. Pero, a la luz de nuestros conocimientos, resulta imposible establecer la periodización constructiva de las murallas.A pesar de esta y otras lagunas, conocemos algunas noticias sobre los arreglos que sufrieron durante el siglo XV. La parte sureste de la ciudad, es decir, la cercana a la actual calle de Cantarranas, sufrió grandes inundaciones en la tercera década del siglo XV, producidas por los ríos Najerilla y el Molinar. Precisamente las primeras menciones a Cantarranas son de este momento. En 1432 llegó a Nájera un cantero del rey para evaluar los daños que sufrió la cerca del Najerilla y determinar qué torres habría que levantar de nuevo, en agosto de ese mismo año, en su reparación participan varias cuadrillas de trabajadores, sumando un total de 160 hombres. De éstas, se citan la del Medio, la Somera, la de San Jaime, la de la Ferrería y la de Tricio.Las obras se llevaron a cabo de la siguiente manera: primero se abrió una cava, tras la que se levantó una estructura de madera y estacas y se terminó la labor de aguar («quitar el agua» ), después, se echó cascajo a la orilla de la obra, dentro de la villa, y se pusieron cantos.En su reparación se utilizan toda suerte de madera y cal, procedente esta última de Val de la Pedrera, término próximo a la ciudad, tierra y piedra, trasladada ésta desde Cenicero y desde Momediano, y cantos, tomados del río Najerilla, de solares abandonados y de las Siete Cuevas.Para acceder a la villa, era necesario cruzar por una de las puertas de la muralla. Al norte, Nájera se abría al exterior por la puerta del Arco. Conocemos su existencia precisamente por los numerosos arreglos anuales a los que era sometida. Hay referencias a la madera, piedra y cerraduras utilizadas en estas tareas. Al oeste, debajo del Alcázar, la puerta de las Eras unía este núcleo con el barrio del Puente, lo que no sucede en la actualidad. Al este, se encontraba la puerta del Puente. De la puerta Lóbrega, que toma su nombre como alusión a su situación geográfica, junto al farallón denominado Paso Malo, tenemos noticias desde el año 1052. Estaba situada al sur, en la salida hacia Tricio por la antigua vía romana. Por último, encontramos referencias a la puerta Antigua, cercana a la muralla de los judíos, desde mediados del siglo XI, y a la puerta de las Carretas, desde comienzos del siglo XVI, pero desconocemos la localización de ambas. ¿Encerraba la muralla un núcleo urbano enteramente ocupado o, por el contrario, existían zonas deshabitadas, ocupadas por huertos y molinos? La existencia de tierras de cultivo y complejos molineros dentro de la villa, ya desde el siglo XI, pone de manifiesto un escaso índice demográfico, que se extiende a lo largo de la Edad Media. Ante la abundancia de testimonios, sólo voy a citar algunos como ejemplo. Hacia [1067], Alfonso y Julián donan a San Quirico, «qui est (...) in urbe Nagerense, (...) orto qui est fundato iuxta ipsa eglesia Sancti Quirici». Del mismo modo, el fuero de Nájera dice «Et si aliquis homo pro qualicumque re escepto furto, se miserit in casa de qualicumque uicino de Nagara non debet esse incalciatus de illa guerta ad intus, et quicumque in calciauerit eum in casa de infancion, debet ducentos quinquaginta solidos». En 1431, se pagan a Pedro Izquierdo y a Juan de Ortega 5 maravedís y medio de jornal por construir regaderas y echar el agua por la calle de la Ferrería, y a Moxica, 8 maravedís, por hacer otra regadera en la calzada. Por último, la iglesia de San Miguel se construyó en 1489, sobre la huerta de San Bartolomé.Los molinos también estaban en el interior de la villa, tal como se deduce de la denominación que se otorga al cauce Molinar y por testimonios que nos informan sobre su presencia dentro de Nájera: «los molinos que son dentro de la villa, en el río Merdenacho».

Datos castillo
Nombre:
Recinto amurallado
Municipio:
Nájera
Localidad:
Nájera
Provincia:
La Rioja
Latitud:
UTM X521.600
Longitud:
Y 4.695.800
Altitud:
485 metros
Emplazamiento concreto:
Llano
Accesos:
Calles
Tipología:
Tipología:
Recinto Amurallado
Clasificación cultural cronológica
Época:
Cristiano Medieval
Sistema constructivo:
Sillería
Elementos estructurales:
Tipo estructura:
Complejo
Planta:
Irregular
Elementos arquitectónicos:
Solo es visible una puerta, el resto esta aprovechado por las casas.La muralla, de la que quedan algunos fragmentos todavía visibles, permiten situar el perímetro probable de la ciudad medieval, a la que envolvían. Estas ruinas se ven, en especial, en la parte norte de Nájera. En la actual plaza de Queipo de Llano o de la Estrella localizamos lo que los textos denominan «puerta del Arco», puerta en paso acodillado, cubierto éste con arco apuntado al exterior y rebajado al interior. También encontramos numerosos restos de lienzos en la Travesía de la Estrella, a partir de los cuales se puede reconstruir casi en su totalidad todo el tramo septentrional amurallado.Al oeste queda una torre cuadrada sobre el monasterio de Santa María la Real, el Torreón. Desconocemos si formaba parte de la muralla o de la protección del propio monasterio, o bien si era, como cuenta la tradición, un puente que unía los castillos de los cristianos, o de la Mota, y el de los judíos, o de Malpica.Sí sabemos que existía muralla en Cantarranas, es decir, al este, por lo que es lógico pensar que todo el conjunto urbano paralelo al río Najerilla estuvo defendido y a la vez a salvo de las riadas.Conocemos, aunque muy erosionadas, las cercas que limitaban al norte la Peña de Malpica. Se trata de una construcción irregular, en la que se intercala sillería muy heterogénea con cantos de río. Perdemos su rastro al oeste, por lo sinuoso del relieve, quizá no llegó a construirse nunca. Descendería, con el terreno, hacia el camino que seguía la ruta de Santiago, sin poder delimitar a ciencia cierta su trayectoria. Ante la presencia de estos importantes restos, hay que preguntarse si estamos en presencia de un «castellum judeorum», tal como dicen las crónicas, o ante la propia judería, que pudo desplazarse al monte Malpica a finales del siglo XII, momento en el que se concedió a los judíos el castillo para su mejor defensa 110.Aun siendo arriesgada esta interpretación, es factible que los judíos habitaran simultáneamente el monte Malpica y la parte norte del barrio de San Miguel. Entre otras razones, podemos llegar, a esta deducción por la abundancia de restos cerámicos y óseos encontrados en dicho monte, por la forma aplanada de su relieve, que haría posible la presencia de viviendas, de las que, por la precariedad de los materiales, no quedan vestigios, porque en Malpica se han encontrado restos de innumerables yesos decorados y parte de algunas piezas de la hanukká 111, en la actualidad en el Museo de la ciudad, que podrían corresponder a la sinagoga, y, por último, porque detrás de Malpica se encuentra un término denominado El Osario, que bien podría tratarse del cementerio de los judíos. Pero todas estas sospechas no se despejarán mientras no se lleve a cabo un plan de excavaciones sistemático y serio.
Estado de conservación:
Estado:
Recinto que conserva algunos elementos
Causas del deterioro:
ErosiónAbandono
Restauración:
Parcial
Uso actual:
Turístico.
Situación legal:
Datos registrales:
Titularidad:
Público
Protección del patrimonio:
Observaciones legales:
Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español
Datos históricos:
La ciudad constaba de dos recintos que separaban el barrio judio del cristiano, existiendo sendos castillos en cada uno de ellos.
Dado el carácter de la villa, hay referencias a la muralla desde 1052. En esta fecha se citan las puertas Antigua y Lóbrega, el azor de los judíos e «illo azor de foras cum sua porta». Por lo tanto, los textos distinguen entre azor o murallas internas y externas: aquéllas corresponderían a los judíos, éstas, a las de la villa. Lógico es pensar que los diversos aumentos demográficos determinarían la ampliación del casco amurallado, como también lo es el suponer que las constantes luchas entre Castilla contra Navarra y Aragón durante el siglo XII, y el enfrentamiento entre Pedro I y Enrique de Trastamara a mediados del XIV, y sus repercusiones sobre las villas, obligarían a sus vecinos a su reparación y mejora constantes. Pero, a la luz de nuestros conocimientos, resulta imposible establecer la periodización constructiva de las murallas.A pesar de esta y otras lagunas, conocemos algunas noticias sobre los arreglos que sufrieron durante el siglo XV. La parte sureste de la ciudad, es decir, la cercana a la actual calle de Cantarranas, sufrió grandes inundaciones en la tercera década del siglo XV, producidas por los ríos Najerilla y el Molinar. Precisamente las primeras menciones a Cantarranas son de este momento. En 1432 llegó a Nájera un cantero del rey para evaluar los daños que sufrió la cerca del Najerilla y determinar qué torres habría que levantar de nuevo, en agosto de ese mismo año, en su reparación participan varias cuadrillas de trabajadores, sumando un total de 160 hombres. De éstas, se citan la del Medio, la Somera, la de San Jaime, la de la Ferrería y la de Tricio.Las obras se llevaron a cabo de la siguiente manera: primero se abrió una cava, tras la que se levantó una estructura de madera y estacas y se terminó la labor de aguar («quitar el agua» ), después, se echó cascajo a la orilla de la obra, dentro de la villa, y se pusieron cantos.En su reparación se utilizan toda suerte de madera y cal, procedente esta última de Val de la Pedrera, término próximo a la ciudad, tierra y piedra, trasladada ésta desde Cenicero y desde Momediano, y cantos, tomados del río Najerilla, de solares abandonados y de las Siete Cuevas.Para acceder a la villa, era necesario cruzar por una de las puertas de la muralla. Al norte, Nájera se abría al exterior por la puerta del Arco. Conocemos su existencia precisamente por los numerosos arreglos anuales a los que era sometida. Hay referencias a la madera, piedra y cerraduras utilizadas en estas tareas. Al oeste, debajo del Alcázar, la puerta de las Eras unía este núcleo con el barrio del Puente, lo que no sucede en la actualidad. Al este, se encontraba la puerta del Puente. De la puerta Lóbrega, que toma su nombre como alusión a su situación geográfica, junto al farallón denominado Paso Malo, tenemos noticias desde el año 1052. Estaba situada al sur, en la salida hacia Tricio por la antigua vía romana. Por último, encontramos referencias a la puerta Antigua, cercana a la muralla de los judíos, desde mediados del siglo XI, y a la puerta de las Carretas, desde comienzos del siglo XVI, pero desconocemos la localización de ambas. ¿Encerraba la muralla un núcleo urbano enteramente ocupado o, por el contrario, existían zonas deshabitadas, ocupadas por huertos y molinos? La existencia de tierras de cultivo y complejos molineros dentro de la villa, ya desde el siglo XI, pone de manifiesto un escaso índice demográfico, que se extiende a lo largo de la Edad Media. Ante la abundancia de testimonios, sólo voy a citar algunos como ejemplo. Hacia [1067], Alfonso y Julián donan a San Quirico, «qui est (...) in urbe Nagerense, (...) orto qui est fundato iuxta ipsa eglesia Sancti Quirici». Del mismo modo, el fuero de Nájera dice «Et si aliquis homo pro qualicumque re escepto furto, se miserit in casa de qualicumque uicino de Nagara non debet esse incalciatus de illa guerta ad intus, et quicumque in calciauerit eum in casa de infancion, debet ducentos quinquaginta solidos». En 1431, se pagan a Pedro Izquierdo y a Juan de Ortega 5 maravedís y medio de jornal por construir regaderas y echar el agua por la calle de la Ferrería, y a Moxica, 8 maravedís, por hacer otra regadera en la calzada. Por último, la iglesia de San Miguel se construyó en 1489, sobre la huerta de San Bartolomé.Los molinos también estaban en el interior de la villa, tal como se deduce de la denominación que se otorga al cauce Molinar y por testimonios que nos informan sobre su presencia dentro de Nájera: «los molinos que son dentro de la villa, en el río Merdenacho».
Bibliografía:
Moya, Riz-Navarro y Arrue: Castillos de La Rioja. Edit Caja de Ahorros de La Rioja, 1992
García Turza, F. J.:“Morfología de la ciudad de Nájera en la edad media”, III Semana de Estudios Medievales, Nájera 1992, IER, Logroño 1993.
Información turística:
Información turística:
Visitable
Horario de visitas:
No tiene. Se encuentra en el exterior.
Acceso al castillo:
Calles
Datos de las imágenes:
Imagen 1Autor: J. Antonio Ruibal
Archivo / Depósito: A.E.A.C.