Formaba parte de las defensas musulmanas (califales, siglo X) del Tajo. El nombre significa las piedras en árabe. Se cree que fue mandado construir en época de Abderramán III hacia el año 947. Después pasó a la taifa de Toledo, en los límites con la de Badajoz. Alcadir lo cedió a Alfonso VI en 1083.
Formaba parte de las defensas del Tajo en época islámica, junto con Espejel, Castros, Azutan y Vascos. Protegía el valle o acceso al río Gualija o Guadalija, son almoravides o almohades saquearon estas instrucciones en los siglos XI y XII. Aun así el castillo permaneció hasta 1460. Se piensa que fue construido por Abderraman III en el año 947.
Formaba parte de las defensas musulmanas (califales, siglo X) del Tajo. El nombre significa las piedras en árabe. Se cree que fue mandado construir en época de Abderramán III hacia el año 947. Después pasó a la taifa de Toledo, en los límites con la de Badajoz. Alcadir lo cedió a Alfonso VI en 1083.
Formaba parte de las defensas del Tajo en época islámica, junto con Espejel, Castros, Azutan y Vascos. Protegía el valle o acceso al río Gualija o Guadalija, son almoravides o almohades saquearon estas instrucciones en los siglos XI y XII. Aun así el castillo permaneció hasta 1460. Se piensa que fue construido por Abderraman III en el año 947.
JIMENEZ DE GREGORIO, Fernando, "Castillos, torres y fortalezas de la Jara" en Boletín de la Asociación Española de Amigos de los Castillos, nº 16. Madrid, 1956.
HURTADO, Publio: Castillos, Torres y Casas fuertes de la provincia de Cáceres.- Mérida: Editora Regional de Extremadura, 1989, pag. 36.
MORENO NÚÑEZ, José Ignacio. Fortalezas en el extremo meridional del Alfar de Ávila. Revista "Castillos de España" nº 90, 1985.